La energía libido, canalizada como energía creativa, dirige todas las acciones del ser humano; de forma contraria, si es mal canalizada, anulada o bloqueada a través de las corazas musculares se provoca una neurosis. La coraza muscular es frío en el músculo lo que hace que esa zona tenga menos circulación de energía. Por ejemplo una de las corazas que traban la energía sexual es la que se genera el bloqueo de la respiración; cuando esta es insuficiente no solo entra menos oxígeno en el cuerpo sino que además se disminuye el ingreso de energía orgonica con la consecuencia de que el estímulo sexual se ve disminuido. Otro ejemplo es el caso de una personalidad agresiva donde el bloqueo mayor se hace en sus brazos.
Estas corazas o armaduras musculares por una parte disminuyen la sensibilidad en general y por la otra generan un gran debilitamiento general en el individuo. Reich creía que las corazas musculares eran las que luego, por una cuestión de desnergización de la zona terminaban en patologías muy comprometidas como ser el cáncer. Uno de los primeros objetivos de Reich era tratar de descubrir de donde provenía la energía libido de la que hablaba Freud, así comenzó a medir con un aparato especial llamado voltímetro, las fluctuaciones eléctricas sobre el cuerpo ante las reacciones que tenían las personas frente a determinadas emociones. De esta forma llegó a descubrir que cuando había miedo el voltaje corporal bajaba y por lo contrario el placer hacía que subiera. De la misma forma descubrió que cuando los genitales se cargaban de energía el voltaje corporal aumentaba.
Reich desarrolla con sus investigaciones en este campo la fórmula del orgasmo:
TENSION-CARGA-DESCARGA-RELAJACION
Más adelante en sus trabajos descubre que todos los órganos del cuerpo están sujetos a esta fórmula. Su investigación con protozoarios, amebas y paramecios lo llevo a descubrir que si se ponía una corriente eléctrica con determinado voltaje en el medio en el que estaban estos seres unicelulares, inmediatamente cambiaban su forma volviéndose redondos, es decir que creaban una especie de coraza de protección ante un estímulo agresivo en el medio. Al repetir esta operación varias veces los pequeños seres ya no volvían a su forma original sino que se mantenían con una coraza constante para no volver a desplegarse jamás.
Reich comenzó a buscar de donde provenían esos pequeños seres con los que investigaba, la respuesta hasta el momento era que estos nacían de huevos depositados en hojas de lechuga y que estos fertilizaban cuando se los colocaba en un medio líquido. La respuesta no lo convenció e investigó el proceso colocando hojas de lechuga en agua. Lo primero que pudo ver fue que al pasar unos días desde las hojas en descomposición se formaban unas pequeñas vesículas que eran liberadas al medio líquido.
Estas vesículas, se agrupaban y se rodeaban de una membrana para transformarse más tarde en ameba o paramecio dependiendo del líquido en que se efectuaba el experimento. De esta forma Reich descubre que estos seres microscópicos no nacían de huevos sino de la misma hoja en descomposición. Este es el descubrimiento de la transformación de la materia no viva en materia viva. El mismo experimento se efectuó con tierra y arena (como ya se ha visto anteriormente) lograndose los mismos resultados.
En algún momento Reich probó hirviendo el caldo de cultivo para corroborar realmente si no había alguna posibilidad de que en las hojas hubiera huevos microscópicos sabiendo que de ser así el calor los eliminaría. La gran sorpresa del investigador fue que con el calor el proceso de transformación se acelero. Llevaba la mezcla a temperaturas de más de 130° y cuando esta comenzaba a enfriarse el proceso degenerativo se aceleraba apareciendo amebas en mucho menos tiempo. Con esto se descartaba totalmente la existencia de huevos o de cualquier otro organismo que provocara la aparición de los protozoos en las hojas utilizadas. De la misma manera experimentó calentando tierra y arena llegando al mismo resultado, ambos producían biones y estos amebas. Así es como Reich descubre y prueba dicha transición.
La vesiculación también cumple con el proceso de tensión – carga – descarga – relajación, es decir que estas vesículas son pulsantes y se hallan sujetas al igual que todos los organismos vivos a la formula del orgasmo o de la vida. Las investigaciones y descubrimientos de Reich generaron grandes discusiones en el mundo científico de la época y los más grandes opositores de sus trabajos fueron los seguidores de Luis Pasteur.
Como síntesis general de lo explicado tenemos que toda la materia viva es gran cargadora de energía. Una célula al igual que todo organismo vivo carga naturalmente más energía de la que elimina llegando a un punto en el que no tiene más capacidad por lo que se produce la duplicación de la misma.
Esta ecuación se produce constantemente hasta que nace el niño y sigue hasta el punto en que el cuerpo llega a su máximo crecimiento previsto genéticamente. Así el crecimiento se detiene pero no el mecanismo de tensión – carga – descarga – relajación, entonces se entra en la etapa de la pubertad y la madurez sexual. La función del orgasmo, ya que el individuo no puede dividirse como una célula, es la de eliminar esa gran tensión o energía de exceso.
Esta ecuación se produce constantemente hasta que nace el niño y sigue hasta el punto en que el cuerpo llega a su máximo crecimiento previsto genéticamente. Así el crecimiento se detiene pero no el mecanismo de tensión – carga – descarga – relajación, entonces se entra en la etapa de la pubertad y la madurez sexual. La función del orgasmo, ya que el individuo no puede dividirse como una célula, es la de eliminar esa gran tensión o energía de exceso.
Esta es una de las razones por las cuales cuando un individuo pasa por un momento de baja energía su sexualidad disminuye. En síntesis el orgasmo es una función natural que permite mantener el equilibrio energético del organismo. Desde ya que la evolución dio otras capacidades para descarga de la libido como ser la creatividad.
2 comentarios:
En el articulo hay una anacronismo cuando se cita a Luis Pasteur (1822-1895) como contemporaneo de W Reich (1897-1957)
El blog me parece fantastico.
HOla! No sé tu nombre, pero estos artículos me están siendo de una gran utilidad en una investigación universitaria. Y estoy descubriendo a un grande como Reich. Felicitaciones por la claridad de exposición.
Un abrazo desde México
Claudio Fabian Guevara
www.vibromancia.com
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